La existencia de la vida en el planeta siempre ha estado en el foco de la comunidad científica y de todos aquellos interesados en conocer los orígenes de las especies.
Los estudios para encontrar al denominado “Último Antepasado Común Universal», en inglés “Last Universal Common Ancestor” o LUCA, están dando frutos gracias a los hallazgos realizados por un equipo internacional de investigadores dirigido por la Universidad de Bristol, Reino Unido.
Así lo reseña la ministra del Poder Popular para Ciencia y Tecnología, Gabriela Jiménez Ramírez, este martes, a través de una publicación en su cuenta en la red social X, en el que expresa que los científicos han buscado el “eslabón perdido” durante siglos, de forma obsesiva. “Lo buscaron con un ansia extraña, casi existencial. Sin poder encontrarlo”.
Precisa, que el trabajo de los investigadores asociados a la Universidad de Bristol permitió identificar «su fecha de cumpleaños».
Comenta que LUCA, no es solo un acrónimo pues “es mucho más que un organismo: es un concepto que hunde sus raíces en las ideas evolucionistas de Charles Darwin y se encuentra en la base del enorme árbol filogenético que organiza toda la vida en la Tierra. Es el punto donde empieza la evolución y, por tanto, toda la biodiversidad”.
Recuerda que este organismo no es el primer ser vivo que existió, pero sí está lo suficientemente lejano en el tiempo para afirmar que permitió la generación de “todas las formas de vida actuales (incluyendo las bacterias más simples que conocemos)”.
Datos científicos
Sobre este hallazgo, la ministra para Ciencia y Tecnología de Venezuela, Gabriela Jiménez Ramírez, refiere que aún se sabe poco, pero “LUCA sería el ‘mínimo común múltiplo’ de la vida terrestre, sí hay algunas cosas que podemos intuir. Cosas como que era un organismo unicelular, extremófilo, primitivo pero autosuficiente. También sabemos que necesitaría un ambiente acuático para sobrevivir y que, con casi total seguridad, no estaría solo en el planeta”.
Explica que es difícil conocer más sobre su esencia o aportes dado que no se han encontrado restos orgánicos para los análisis científicos requeridos. Recuerda que LUCA tendría unos 4.000 millones de años. “Es más, de encontrarlos, es muy posible que estuvieran tan degradados que fueran imposibles de estudiar con detalle”.
Para poder avanzar en este proceso, los investigadores tuvieron que recopilar los genes de «más bacterias, arqueas, animales, plantas y hongos para modelar computacionalmente ese ancestro común; Esto permitió descubrir cuándo surgió».
Agrega que el equipo internacional de investigadores remontó por ese “ ‘árbol de la vida’ hasta poder determinar con precisión inédita el momento en que LUCA surgió. Es decir, hace 4.200 millones de años; 400 millones de años después de la formación del planeta”.
Comenta que esta hazaña de la ciencia es una gran sorpresa. “Como explicaba Sandra Álvarez-Carretero, coautora del estudio e investigadora en la Escuela de Ciencias de la Tierra de Bristol, ‘no esperábamos que LUCA fuera tan antiguo, dentro de solo unos cientos de millones de años de la formación de la Tierra. Sin embargo, nuestros resultados encajan con las visiones modernas sobre la habitabilidad de la Tierra primitiva’”.
Agrega que la aparición temprana de LUCA “ayuda a explicar la enorme diversidad que hay, entre arqueas y procariotas”.
Asimismo, hace referencia a otro coautor del estudio, Davide Pisani, que expresa: «lo que es realmente interesante es que está claro que poseía un sistema inmunológico temprano, mostrando que incluso hace 4.200 millones de años, nuestro ancestro estaba involucrado en una carrera armamentista contra virus».
Árbol de la vida
La ministra para Ciencia y Tecnología expresa que, desde hace 400 millones de años el mundo es el que conocemos, con «millones de seres vivos luchando por sobrevivir un día más».
Expresa que el concepto moderno de árbol de la vida, en biología, se remonta al siglo XIX, gracias a Charles Darwin y Ernst Haeckel “quienes interpretaron e ilustraron en forma de árbol las relaciones de parentesco entre los seres vivos”.
Finaliza explicando que “Hoy día la clasificación de los seres vivos sigue un principio filogenético de ascendencia-descendencia directa (principio de monofilia) y así se ofrece una sistemática que integra la diversidad morfológica (taxonomía) y la evolución (filogenia). La revolución que ha supuesto la filogenia basada en secuencias de ADN en la clasificación de los seres vivos, tiene consecuencias fundamentales para poder entender sus verdaderas relaciones de parentesco”.
Oficina de Gestión Comunicacional del Ministerio del Poder Popular para Ciencia y Tecnología / Periodista: Vanessa Gutiérrez.
